En "¡Nada!", quieres reclamar tantos dados iguales como sea posible; hasta que no queden dados iguales, es decir, en ese momento puedes gritar "¡Nada!" para reclamar lo que queda.

En cada ronda, empiezas cogiendo seis dados blancos y seis dados naranjas, cada uno con seis símbolos diferentes. Alguien tira todos los dados en el centro de la mesa, entonces los jugadores compiten para ser los primeros en gritar un símbolo que esté en al menos un dado blanco y uno naranja. Si acierta, el jugador recoge todos los dados que muestren ese símbolo; si no, no recoge nada y se queda sin jugar el siguiente turno. Una vez que un jugador ha reclamado los dados, este jugador vuelve a tirar todos los dados restantes. Si no se encuentra ninguna coincidencia, el primer jugador que grite "¡Nada!" y cubra los dados con su mano reclama todos los dados restantes. Los jugadores cuentan sus puntuaciones, un punto por cada dado recogido, y luego juegan otra ronda. Quien tenga la puntuación más alta después de tres rondas gana!

¡Nada! incluye reglas variantes para otros dos juegos. En uno, los jugadores utilizan los 36 dados a la vez, jugando como en el caso anterior, pero lo más probable es que consigan más puntos cada vez, ya que habrá más dados en juego. La ronda termina después de que todos los dados de un color hayan sido reclamados, y el jugador que recoge más dados gana.

En la otra variante, los jugadores comienzan la partida sacando secretamente 8, 12 o 16 dados de la bolsa (con el número basado en el número de jugadores). En un turno, cada jugador elige de 2 a 4 dados de su bolsa, y luego todos los jugadores tiran sus dados simultáneamente, reclamando dados como se ha explicado anteriormente. Los jugadores recuperan los dados no reclamados y vuelven a elegir 2-4 dados para el siguiente turno. Una vez que un jugador no tiene más dados en la mano, el juego termina, y el jugador que ha recogido más dados gana.