En esta interesante oferta de Warfrog, los jugadores se convierten en dioses que buscan dominar un mundo con sus seguidores. La primera parte del juego implica la construcción del tablero de juego, después de lo cual los jugadores se turnan usando cartas para determinar cuántas personas nuevas deben aparecer y qué tipo de terreno habitarán. Todas las tribus empiezan como bárbaros, pero pronto el efecto calmante de la civilización se asienta en las bandas de merodeadores; aunque las tribus civilizadas puntúan más, ya no pueden atacar. Lo que sí pueden hacer, sin embargo, es civilizar a los seguidores de otros jugadores. Claro que le da más puntos a los oponentes, pero al menos esos seguidores no irán tras de ti!